El Golobar es un paraje de montaña localizado al norte de la provincia de Palencia, en España, en la frontera de Castilla y León con Cantabria. Está situado en una comarca de gran riqueza ecológica, la Montaña Palentina, en el término municipal de Brañosera, el municipio más antiguo de España.

Con impresionantes vistas panorámicas, senderos para caminar y rutas para bicicletas, es un lugar ideal para aquellos que buscan una experiencia natural única. Sin embargo, a finales de los años 1960 se proyectó la instalación de una estación de esquí en la Collada de Golobar, con el objetivo de aprovechar las impresionantes condiciones naturales del lugar y convertirlo en un destino turístico de invierno atractivo.

La zona de esquí de El Golobar discurría por el valle del río Camesa, con pistas frente a la sierra de Hijar, frente al pico Cuesta Labra, en una zona denominada «Loma», con cotas entre 1.606 m y 1.425 m. Allí se instalaron dos telesquís y un telebaby movidos por un motor de gas-oil que han sido utilizados durante distintas épocas, la última en los años noventa.

El Golobar es un paraje de montaña localizado al norte de la provincia de Palencia, en España, en la frontera de Castilla y León con Cantabria. Está situado en una comarca de gran riqueza ecológica, la Montaña Palentina, en el término municipal de Brañosera, el municipio más antiguo de España. 
Con impresionantes vistas panorámicas, senderos para caminar y rutas para bicicletas, es un lugar ideal para aquellos que buscan una experiencia natural única. Sin embargo, a finales de los años 1960 se proyectó la instalación de una estación de esquí en la Collada de Golobar, con el objetivo de aprovechar las impresionantes condiciones naturales del lugar y convertirlo en un destino turístico de invierno atractivo.
La zona de esquí de El Golobar discurría por el valle del río Camesa, con pistas frente a la sierra de Hijar, frente al pico Cuesta Labra, en una zona denominada "Loma", con cotas entre 1.606 m y 1.425 m. Allí se instalaron dos telesquís y un telebaby movidos por un motor de gas-oil que han sido utilizados durante distintas épocas, la última en los años noventa.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, la estación nunca llegó a construirse y El Golobar sigue siendo un paraje virgen y prácticamente desconocido para el turismo. El proyecto se vio afectado por varios factores, entre ellos, la falta de apoyo financiero y la oposición de algunos grupos ecologistas y ambientales. Finalmente, las instalaciones fueron desmanteladas en 2009 por la Junta Vecinal de la Brañosera. 
Aunque el proyecto de estación de esquí no llegó a realizarse, El Golobar sigue siendo un lugar especial para aquellos que buscan una experiencia natural única y un escape del bullicio de la vida cotidiana. 
La Montaña Palentina es un lugar con una gran belleza natural y una rica historia y cultura, y la estación de esquí de El Golobar hubiera sido una excelente oportunidad para desarrollar turismo sostenible y preservar su patrimonio. 
Sin embargo, aunque la estación de esquí nunca se construyó, El Golobar sigue siendo un lugar especial para aquellos que buscan una experiencia natural única, con senderos para caminar, rutas en bicicleta y oportunidades para la observación de la naturaleza.

Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, la estación nunca llegó a construirse y El Golobar sigue siendo un paraje virgen y prácticamente desconocido para el turismo. El proyecto se vio afectado por varios factores, entre ellos, la falta de apoyo financiero y la oposición de algunos grupos ecologistas y ambientales. Finalmente, las instalaciones fueron desmanteladas en 2009 por la Junta Vecinal de la Brañosera.

Aunque el proyecto de estación de esquí no llegó a realizarse, El Golobar sigue siendo un lugar especial para aquellos que buscan una experiencia natural única y un escape del bullicio de la vida cotidiana.

La Montaña Palentina es un lugar con una gran belleza natural y una rica historia y cultura, y la estación de esquí de El Golobar hubiera sido una excelente oportunidad para desarrollar turismo sostenible y preservar su patrimonio.

Sin embargo, aunque la estación de esquí nunca se construyó, El Golobar sigue siendo un lugar especial para aquellos que buscan nieve para diversión para los niños y una experiencia natural única, con senderos para caminar, rutas en bicicleta y oportunidades para la observación de la naturaleza.

esqui collada golobar
esqui collada golobar